La uniformada dijo que la dominicana es imputada por delitos de asalto en primer grado, violencia doméstica, poner en peligro el bienestar de los menores, asalto criminal y posesión criminal de un arma peligrosa.
El hombre estaba estacionado en su yipeta Range Roover color dorado, cuando ella lo interceptó martillo en mano y comenzó a dar martillazos a diestra y siniestra, pese a los gritos de “¡papi, papi!”, de los niños y el terror que ellos reflejaban en sus caritas.
La policía de la ciudad dijo que acusó a la mujer, cuyo nombre no iba a liberar.El padre de los niños, que estaba dentro del vehículo, grabó en video las acciones de la madre y llamó a la policía, dijeron las autoridades. Su nombre tampoco fue revelado por la policía.
El incidente ocurrió alrededor de las 12:45 de la tarde del domingo en la esquina de la calle 24 Oeste, cerca de la avenida 21, dijo el capitán Richard Reyes.
La mujer había dejado la escena cuando los agentes respondieron, por lo que la policía presentó quejas contra ella, pero no la arrestaron, porque al parecer la mujer se había ido.
La madre aparentemente estaba molesta por una disputa de custodia, dijo la policía. El video la muestra caminando por el vehículo, que parece una minivan, golpeando con el martillo las ventanas y haciendo volar los cristales. También rompió los faros y al menos un espejo retrovisor.
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