2-1: Bayern de Munich, campeón de la Champions League al derrotar al Borussia Dortmund
Por: Joaquín Vázquez
El Bayern Munich conquistó la Champions League en la edición 2012-2013 al derrotar (2-1) a su rival, Borussia Dortmund, en la primera final alemana de la historia de la mayor competición europea.
En un partido de infarto, con muchas situaciones de gol y emociones, el Bayern que dirige Jupp Heynckes supo tener mós oficio que los entrenados por Klopp. El encuentro se definió en los instantes finales y terminó dando la quinta Champions League de su historia a los "Bávaros".
La primera etapa fue atractiva y cambiante. Los jugadores del Borussia comenzaron el encuentro mucho más concentrados, con el énfasis puesto en la pronta recuperación del balón para lograr jugar en terreno ajeno. El objetivo se cumplía con efectividad, lo que le permitía al conjunto de Dortmund ser más sólido en ofensiva.
A los 13 minutos, Lewandowski tuvo la primera chance del encuentro con un remate desde afuera del área, que sacó el arquero Neuer por arriba del travesaño. Tan solo un minuto después, Blaszczykowski arremetió a la salida de un córner y se volvió a encontrar con la figura del guardameta bávaro.
El dominio del Borussia se traducía en sus constantes intentos en ataque, los cuales se continuaron con una escapada de Reus, quien sacó un potente disparo que, nuevamente, encontró bien parado a Neuer.
El Bayern comenzó a sacudirse el acoso del Dortmund con más precisión en el pase y llegando más al portal de Weidenfeller.
El arquero gualdinegro desvió a corner un cabezazo de Manzukic y varios mano a mano con Robben, uno muy claro que dió en pleno rostro de Weidenfeller que salió a tapar la llegada del holandés y tuvo la suerte de 'cara', nunca mejor dicho.
Los Tigres de Dortmund” iban a volver a pisar con fuerza en terreno rival. Lewandowski se le escapó a la última línea “Bávara”, pero otra vez Neuer achicó bien y le ahogó el grito al goleador polaco.
Ambos guardametas eran la clave para que el encuentro siguiera sin goles. Tanto Neuer como Weidenfeller habían sido efectivos en cada ocasión en que fueron retados por los atacantes rivales. Esa tónica se iba a mantener hasta el descanso.
El segundo tiempo arrancó más relajado, sin el dinamismo de los primeros 45 minutos. Pero solo en los primeros minutos, ya que a partir del 14, llegaron los momentos más dinámicos y determinantes del choque y su definición final.
El Bayern logró la ventaja en el marcador a los 14 minutos. Ribery cedió para Robben, este se fue hasta el fondo por izquierda y, cuando el arquero salió a taparlo, asistió hacia el centro para el ingreso en soledad de Mario Mandzukic. El goelador croata empujó el cuero y selló el 1-0.
La alegría iba a durar poco ya que, a los 22, Dante le pegó una patada en el estómago a Reus dentro del área, lo que obligó al árbitro italiano Rizzoli a sancionar el claro penalti, pero no así la amonestación al defensa brasileño, que hubiese significado su expulsión al tener ya una tarjeta amarilla . El turco Ilkay Gundogan fue el encargado de ejecutar desde los once metros para igualar el marcador.
El empate infló el espíritu de “Los Tigres” de Dortmund, quienes estuvieron cerca de revertir el resultado con un perfecto contraataque que Hummels, no pudo materializar al lanzar por encima del travesaño.
Do minutos después, llegó una de las jugadas que quedarán en el recuerdo. Muller habilitó a Robben, quien ingresó solo para definir, con todo el arco a su disposición. El holandés fue lento en su reacción, no se tiró a empujar la pelota y permitió que Subotic realizara un cierre magistral en la línea. La acción se festejó como un gol entre jugadores y cuerpo técnico del Borussia.
El Bayern seguía volcado en ataque, exigiendo al arquero Weidenfeller quien volvió a probar que fue una de las figuras del partido con una nueva gran respuesta ante un remate de Alaba desde fuera del área. Lo mismo ocurrió con un intento de Schweinsgsteger, a cuatro minutos para el final.
Pero el fútbol es justo a veces y reivindicó a Arjen Robben. El 'holandés errante', que ha sido campeón de liga en Holanda, Inglaterra, España y Alemania, no tenía ningún título internacional, y muchos recuerdan su acción ante Iker Casillas en la final del Munidal Sudáfrica 2010, cuando el meta español le desvió a corner un mano a mano que pudo hacer a los 'tulipanes' campeones mundiales.
Su gol, a dos minutos del final, desató la alegría del bando 'rojo' del mítico Wembley y la tristeza en el bando 'amarillo', que esperaba con ilusión la prórroga y dar la sorpresa.
El Bayern logra así su quinto título de Champions, e iguala su record de victorias y derrotas en diez finales disputadas. Ahora, el conjunto bávaro puede hacer historia si derrota al Sttutgard en la final de Copa alemana, ya que lograría el triplete de Champions, Liga y Copa.
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